La importancia de nuestros estudios acerca de los mecanismos moleculares involucrados en la síntesis de esteroides y en la proliferación y diferenciación celular, en el testículo de los mamíferos, radica en que los resultados obtenidos llevarán a una mejor comprensión de los procesos relacionados con la fertilidad humana.

Por otro lado, en trabajos recientes se señala que la incidencia del cáncer testicular en el mundo ha aumentado significativamente en los últimos años, siendo actualmente uno de los tipos de cáncer más frecuente en hombres de 15 a 44 años en países con elevado índice de desarrollo humano (IDH) como Suecia, Reino Unido, Estados Unidos y China. Al mismo tiempo, la introducción de terapias a base de cisplatino hacia finales de la década del 70 ha conducido a una significativa disminución de la mortalidad por cáncer testicular en estos países, pero no se observa la misma tendencia en países con IDH bajo, donde los sistemas de salud a menudo no están adaptados para ofrecer un tratamiento óptimo. A su vez, al día de hoy no existe en ningún país del mundo una terapia efectiva contra los tumores metastásicos de células de Leydig, y la sobrevida de estos pacientes se reduce a dos años. Particularmente en la República Argentina, entre los años 2009 y 2016 (últimos datos disponibles), se registraron 1487 defunciones por tumor maligno de testículo en establecimientos hospitalarios oficiales, según los registros provistos por la Dirección de Estadísticas e Información en Salud del Ministerio de Salud de La Nación (deben destacarse los problemas de cobertura de algunos archivos jurisdiccionales). Teniendo en cuenta lo expuesto, se prevé que los resultados de la nueva línea de trabajo del laboratorio, basada en el estudio de los tumores de células de Leydig, tendrán, a futuro, impacto positivo en la salud humana a nivel nacional e internacional.

Finalmente, en un trabajo conjunto con la Unidad de Endocrinología del Hospital Escuela de Medicina Veterinaria (FCVet-UBA), estamos estudiando distintos tratamientos para el Síndrome de Cushing (SC). Para ello, en nuestros trabajos, utilizamos perros con esa patología, lo cual representa un excelente modelo experimental dado su similitud con la enfermedad en el humano, tanto en la etiología como en su presentación clínica. Los resultados obtenidos en esta especie tienen un interesante potencial de transferencia para la medicina humana, donde la casuística de SC es baja y no permite realizar estudios con numerosos pacientes.