Palabras de la Dra. Damasia Becu, Directora del IBYME
Llegamos a fin de año con necesidad de hacer un balance. ¿Hemos permanecido, hemos perdurado y transcurrido, o hemos honrado la vida? Cada año deja en nosotros una marca, en lo personal, en lo institucional pero siempre crecemos, a pesar de las tormentas y gracias a las tormentas.
En particular recordaré al 2017 como un un año difícil, de mucha lucha en lo económico, y dificultades de infraestructura y obras. Pero cada conflicto es puntapié para el crecimiento, y a la gran escasez de fondos la enfrentamos con mayor actividad en fundraising y búsqueda de subsidios internacionales. Así termina el año con la generosa donación de las fundaciones Williams y Baron que han emprendido con nosotros un gran proyecto, la creación de un área de microscopía para IBYME y para investigadores de todo el país, que será ubicada en el tercer piso. Allí tendremos tres o cuatros microscopios únicos, el láser capture, el spinning disk con incubador y un microscopio confocal nuevo, de súper resolución, único en Latinoamérica, obtenido por un concurso PME. El proyecto es ambicioso y demuestra que queremos crecer aunque estemos batallando por comprar tips. En fundraising también este año fuimos ayudados por la Fundación Fortabat con un contador gama nuevo. Siempre que se cierra una puerta se abre una ventana.
Será recordado también por los numerosos e importantes premios recibidos por miembros del IBYME, destacando la incorporación de Gabriel a la Academia del los Estados Unidos, y su reciente distinción como investigador de la Nación Argentina. Los dos premios los obtuvo siendo el más joven, y ambos llegan al IBYME por primera vez lo que jerarquiza a nuestra institución, pero más que nada son premios que nos llenan de orgullo y alegría por nuestro colega y amigo. También destacamos el premio Hipócrates al Dr. Calandra.
2017 será recordado como el año que se termina exitosamente el convenio Beta/Denver, y eso nos alegra por quienes gestaron el proyecto: Eduardo Charreau, Nestor Annibali, Mercedes Goin, Graciela Trejo. Demuestra que somos capaces no sólo de hacer ciencia de excelencia sino de cristalizar proyectos de carácter social.
Cada año trae su cuota de crecimiento en estructura, y este año fue el cuarto para freezers, pequeño avance pero lo importante es dar pasos para adelante. Es el año del proyecto de unidad ejecutora, concursado internamente y luego con éxito en el CONICET. El proceso nos demostró que podemos discutir, proponer, debatir, competir entre nosotros y finalmente consensuar. Creo que fue una excelente experiencia.
En difusión de la ciencia el video muestra la increíble actividad realizada. A pesar de que no hubo Noche de los Museos, el IBYME salió a los colegios, invitó pacientes con endometriosis, y tuvo una increíble actividad en los medios, su página web con noticias propias, el Newsletter y el Facebook de la Fundación, que sacó un post cada cuatro días. El IBYME ya es marca registrada.
Sin embargo como siempre remarco, lo que nos hace conocidos y real marca registrada es la calidad de ciencia que producimos. El país confía en que trabajemos seriamente en ciencia original, para desentrañar problemas orientados a la salud humana o simplemente a los misterios de la naturaleza. Nunca podemos dejar de tener este horizonte por delante. Y a pesar de las dificultades de cada año el IBYME publica un trabajo en revistas con referato cada tres o cuatro días, es decir un promedio de 120 por año. Creo que eso es nuestra mayor marca registrada.
Estas publicaciones no son solo de investigadores becarios y técnicos. Les pertenecen a todos los que trabajan aquí. Si yo tuviera que definir al IBYME me viene a la mente la palabra EQUIPO. Hay equipo, hay equipos, algunos más silenciosos, algunos más activos, pero en cada rincón hay alguien trabajando por IBYME: Sedronar, ARN, Comité de Ética, Comité de seguimiento de tesis, Comité de evaluación de CPA, Cicual, ministros y superministros, informáticos, biblioteca, bioterio, compras conjuntas, limpieza, mantenimiento, comunicación, seguridad e higiene, administración, cursos, seminarios, aulas, fundraising, brigadistas, nitrógeno, cuartos de cultivo, solidaridad. Cada equipo trabaja con autonomía y para todos.
La madre Teresa de Calcuta decía: “Yo hago lo que tú no puedes, y tú haces lo que yo no puedo. Juntos podemos hacer grandes cosas”. Ninguno de nosotros es tan inteligente como todos nosotros. Por lo que la producción científica del IBYME resulta en parte gracias al apoyo de todos.
Así terminamos el año, no hemos permanecido y transcurrido, hemos honrado la vida, hemos honrado el trabajo. Brindo y agradezco a cada uno, brindo por sus familias, por unas bendecidas fiestas en cada mesa, y vamos por un 2018 mejor!!!