Desde hace varios años, el grupo de investigación dirigido por la Dra. Virginia Novaro estudia el rol de unas proteínas específicas, llamadas “quinasas”, en la progresión del cáncer mamario. Dichas proteínas pueden considerarse “marcadores moleculares” ya que sirven para monitorear el curso de la enfermedad e indican qué pacientes pueden beneficiarse con la incorporación de tratamientos selectivos.

“Utilizamos modelos experimentales y analizamos muestras de pacientes trabajando en colaboración con médicos oncólogos de distintas instituciones de la región. La obtención de dichas muestras se realiza de acuerdo con normativas éticas correspondientes para cada caso”, señala la Dra. Virginia Novaro.

Recientemente, el grupo ha logrado determinar que las pacientes que tienen elevados niveles de la forma activa de la proteína quinasa S6 en el tejido tumoral, tienen aproximadamente 5 veces mayor riesgo de recurrencia de la enfermedad. En estos casos, se recomienda realizar un control más frecuente de su estado clínico para poder brindar tempranamente el tratamiento más conveniente. El procedimiento utilizado para la determinación de la actividad de la proteína S6 tiene la ventaja de ser un método sencillo, que puede utilizarse en la práctica clínica de rutina, realizable a muy bajo costo y en laboratorios de baja complejidad.

“En cáncer de mama, cada año surgen tratamientos o estrategias diagnósticas novedosas. Sin embargo, la mayoría son altamente costosas y poco accesibles para el promedio de las pacientes de nuestro país. Tener conocimiento de la población local y disponer de un método sencillo que mejora el diagnóstico y seguimiento clínico, es fundamental para dirigir los tratamientos disponibles de manera más eficiente para cada paciente en particular y en la práctica clínica en general”, concluye la Dra. Novaro.

  • El grupo ha demostrado que una paciente con cáncer mamario que presenta altos niveles tumorales de la proteína S6 tiene un riesgo de recurrencia de la enfermedad mayor que una paciente con bajo nivel tumoral de S6. El riesgo es aún mayor en las pacientes cuya enfermedad ha avanzado a los ganglios axilares. Así, estas determinaciones podrían ser de utilidad para seleccionar a las pacientes que deberían tener un control médico más frecuente y serían candidatas para recibir una terapia dirigida.
IMAGEN realizada por Florencia Cascardo, en Biorender.